Martes 2 de Diciembre Jerusalén es una Lección Viviente
Texto bíblico: Miqueas 4:6-13
6 “«En aquel día», afirma el Señor, «reuniré a las ovejas lastimadas; reuniré a las exiliadas y las maltratadas por mí. 7Con las ovejas lastimadas formaré un remanente y con las exiliadas, una nación poderosa. El Señor reinará sobre ellas en el monte Sión desde ahora y para siempre. 8 Y tú, torre del rebaño, colina fortificada de la hija de Sión: a ti volverá tu antiguo poderío, la soberanía de la ciudad de Jerusalén». 9 Ahora, ¿por qué gritas tanto? ¿Acaso no tienes rey? ¿Por qué te han venido dolores de parto? ¿Murió acaso tu consejero? 10Retuércete y puja, hija de Sión, como mujer a punto de dar a luz,porque ahora vas a salir de tu ciudad y tendrás que vivir a campo abierto. Irás a Babilonia, pero de allí serás rescatada; el Señor te librará del poder de tus enemigos. 11 Ahora muchas naciones se han reunido contra ti. Y dicen: «¡Que sea profanada Sión! ¡Disfrutemos del espectáculo!». 12 Pero ellas no saben lo que piensa el Señor ni comprenden sus designios; no saben que él las junta como a gavillas en la era. 13 ¡Levántate, hija de Sión! ¡Ponte a trillar! Yo haré de hierro tus cuernos y de bronce tus pezuñas, para que conviertas en polvo a muchos pueblos, y consagres al Señor sus ganancias injustas; sus riquezas, al Señor de toda la tierra.”
Algunos pensamientos
Como mencioné en el primer domingo de Adviento, un tema central del Adviento es el regreso del Señor y el establecimiento de su Reino eterno. Para la mayoría de nosotros, esto suena más bien como la trama de una novela, algo medianamente interesante, pero no es algo con lo que nos sintamos involucrados o tengamos una conexión profunda. Conocer el contexto de este pasaje puede ayudarnos a pasar de leer casualmente, sobre algo que sucedió hace miles de años, a comprender mejor los caminos de Dios. Puede impulsarnos a comprender mejor Su plan (v. 12).
Jerusalén es una de las ciudades más singulares del mundo. En el antiguo Cercano Oriente, era común que una ciudad fuera destruida o, en algunos casos, asimilada tras ser derrotada. Si se demolía, su identidad se perdía por completo. No fue así con Jerusalén. Aunque en ocasiones esa ciudad fue destruida, ha sobrevivido para ser la ciudad más crucial del mundo. Algunas piedras que Salomón usó para construir el Templo alrededor del año 1000 a. C. todavía se encuentran en el mismo lugar.
En este pasaje, Miqueas profetiza que los israelitas serán enviados al exilio y sufrirán en Babilonia debido a su liderazgo impío y la disciplina de Dios. Dios prometió que cuando se humillaran ante Dios y se arrepintieran de sus actos, Él restauraría al pueblo y restauraría a Jerusalén, Su ciudad. Miqueas predice que muchas naciones se levantarán contra Jerusalén, solo para ser derrotadas y disciplinadas por Dios. A veces, leeremos todo esto como solo una historia interesante. Pero piensa en el hecho de que la Biblia no dice nada sobre otras ciudades importantes como Nueva York, Londres, Río o Tokio pero sí dice mucho sobre Jerusalén. Puesto que no conocemos los pensamientos del Señor ni entendemos Su plan, debemos prestar atención a lo que dice sobre Su ciudad. Él tiene un plan para Su pueblo y para Su ciudad. Dios no ha terminado Su obra planeada para Jerusalén.
Oración
Oh, mi Creador, ¿nos estás guiando a cada uno de nosotros para que seamos más piadosos? ¿O es solo una idea metafísica sin evidencia? ¿Es el hombre solo una constante repetición de sí mismo? Sabes que, a lo largo de estos veinte horribles años, me ha sostenido la creencia de que trabajaba contigo, que nos llevabas a cada uno de nosotros… a la perfección. Oh, Señor, incluso ahora, intento erróneamente quitar de Tus manos el control de Tu mundo. He buscado muy poco de algo superior, y mejor, que mi propia obra: la obra de la Sabiduría suprema, que nos usa, lo sepamos o no. Señor, ayúdame a comprender Tus pensamientos y Tu plan. En el nombre de Jesús. Amén. –Adaptado de Florence Nightingale